Ignoraba lo puta que era mi esposa. Relatos Marqueze Y que he disfrutado con ello. Pero permítanme que les cuente. Si bien he de admitir que con el tiempo me he acostumbrado e incluso ahora lo prefiero y disfruto mucho de ello, cuando la vi así por primera vez me sorprendió que hubiera sido capaz de hacer tal cosa, algo que al menos eso pensaba yo en aquella época solo hacen las prostitutas y las actrices porno. A partir de ahí la situación fue degenerando poco a poco. Mientras me preguntaba qué tal me había ido el día se me echaba encima, se frotaba sensualmente contra mí, me lamía el cuello y me besaba. Yo solía contestar evasivo, me la quitaba de encima alegando estar agotado tras la jornada laboral y me dirigía a la habitación para cambiarme de ropa.
A veces estas cosas pasan A veces estas cosas pasan Perdí la alucinación del ojo derecho con treinta abriles. Me hicieron mil pruebas y jamás supieron decirme por qué. Tras la enésima resonancia magnética, una neuróloga se sentó conmigo, se encogió de hombros y dijo: Lo siento, a veces estas cosas pasan. Campos cronopio 10 de julio de Pero yo no me di por vencido. Durante todo un año leí literatura médica, sin tener ni puta idea pero con mucha voluntad. Como resultado me convertí en un pequeño experto sobre patologías del nervio óptico. Lo sigo siendo. Y estudie Periodismo.
Ya conté en mi primer relato congruo sobre nosotros, cómo nos conocimos y cuestiones físicas de cada uno. En mis posteriores relatos ya no volveré a repetir todas estas descripciones y asuntos pues siempre he pensado cuando he leído los relatos de aquende que hay gente que se excede demasiado con describir y explicar las cosas y tardan demasiado en acudir al asunto que al fin y al cabo es lo que buscamos quienes leemos relatos. También expliqué cómo a ella eso le había costado un matrimonio y a mi me había costado una relación de relaciones de siete años. En cuanto a nuestro físico, ya lo describí en mi primer relato el que quiera que lo busque y conté la primera vez que la vi, en su juerga con Rodolfo. Solo quiero añadir que estos relatos que he empezado a contar, como ya joya en el primero, son nuestras experiencias o aventuras a lo largo de nuestros 16 años juntos. Mi madama, como ya dije en el frontal, tiene actualmente 47 años y yo Cuando nos conocimos yo tenía 27 y ella Lo que no dije en el anterior es que cuando la conocí con 31 y durante unos 14 años, ella siempre vestía de manera muy sexy. No es que fuera vestida de puta pero sí que le gustaba siempre ir con falditas y guardarropía cortitos pues odiaba o se sentía mal con faldas largas.